El reciclaje es una práctica cada vez más importante en nuestra sociedad, y en municipios como Dénia, su impacto positivo es innegable. Pero ¿qué es realmente el reciclaje y cuáles son sus beneficios para nuestra comunidad? ¡Descúbrelo a continuación!
¿Qué es el reciclaje?
El reciclaje es el proceso de convertir materiales usados en nuevos productos, evitando así el desperdicio de recursos naturales y reduciendo la cantidad de residuos que terminan en vertederos. En Dénia, esta práctica se ha vuelto fundamental en la gestión de residuos, con programas de recogida selectiva y concienciación ciudadana que puedes consultar en Viu i conviu.
Beneficios del reciclaje para Dénia
Existen, al menos, cinco beneficios del reciclaje para Dénia. Sigue leyendo para conocerlos.
Conservación de recursos naturales
El reciclaje reduce la necesidad de extraer y procesar nuevos materiales, lo que ayuda a conservar nuestros recursos naturales y preserva los ecosistemas locales.
Reducción de la contaminación
Al reciclar, disminuimos la cantidad de residuos que se envían a vertederos, lo que reduce la contaminación del suelo, el aire y el agua. Esto contribuye a mantener un entorno más limpio y saludable para todos los habitantes de Dénia.
Generación de empleo
La industria del reciclaje crea puestos de trabajo locales en la recogida clasificación y tratamiento de materiales reciclables, lo que beneficia a la economía de nuestra ciudad y promueve el desarrollo sostenible.
Ahorro de energía
Reciclar materiales como el papel, el vidrio y el plástico requiere menos energía que producir nuevos productos a partir de materias primas. Esto ayuda a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y a combatir el cambio climático.
Fomento de la conciencia ambiental
El reciclaje promueve la educación ambiental y la responsabilidad individual en cuanto al destino que le damos a nuestros residuos.
¿Cómo podemos contribuir?
Todos podemos colaborar en el esfuerzo de reciclaje en Dénia. Separar los residuos en casa según su tipo, utilizar los contenedores de reciclaje adecuados y reducir el consumo de productos de un solo uso son algunas formas simples pero efectivas de hacer nuestra parte.
En ocasiones, puede resultar complicado diferenciar qué residuos deben ser depositados en cada uno de los contenedores que encontramos en nuestro municipio. A continuación, te proporcionamos una lista de los residuos correspondientes a cada uno de ellos.
Contenedor amarillo
Dentro del contenedor amarillo, debemos depositar: botellas y envases de plástico, envases metálicos, briks y envases de madera.
Es lógico pensar que todos los objetos que estén fabricados con plástico y que ya no nos son de utilidad, van al contenedor amarillo, pero no siempre es así. En el contenedor amarillo debe depositarse exclusivamente lo citado anteriormente.
Fuente de la información: Ecoembes.
Contenedor azul
En el contenedor azul hay que depositar solo papel y cajas de cartón: envases de alimentación, calzado, productos congelados, papel de envolver, papel de uso diario, etc.
Un pequeño truco para ahorrar espacio en el cubo y aumentar su capacidad es doblar y comprimir los envases en vez de arrugarlos. Así te será más fácil separarlos.
Fuente de la información: Ecoembes.
Contenedor verde
Aquí debemos depositar botellas de vidrio (vino, cava…), frascos de vidrio (como perfumes o colonias) o tarros de alimentos (mermeladas, conservas, etc.).
Errores más comunes
Pero al igual que en el contenedor amarillo, también pueden encontrarse residuos impropios. ¡Ojo, es muy importante diferenciar el vidrio del cristal! Al verde solo debe ir al vidrio. Algunos errores comunes se dan cuando llega la hora de reciclar bombillas (que deben llevarse al punto limpio o a centros de recogida), y los espejos, ceniceros, vasos y vajillas también deben ser depositados en los mismos lugares.
Fuente de la información: Ecoembes.
Contenedor de orgánico
Lo que debe depositarse en este contenedor es: restos de alimentos como pieles de frutas, espinas de pescado, plantas, cascaras de huevo o posos; o servilletas y papel de cocina usados.
Los errores más comunes son depositar restos no orgánicos como objetos de cerámica, pañales, colillas, chicles, toallitas húmedas, arena para mascotas, pelo, polvo, etc.
Fuente de la información: Ecoembes.
En Dénia este contenedor dispone de acceso restringido a residentes y segundos residentes mediante una tarjeta asociada a la vivienda del poseedor de la misma. Dicha tarjeta la puedes conseguir si eres residentes o segundos residentes acudiendo a la oficina de atención ciudadana de Urbaser (avenida Marquesat, 5) y dándote de alta, presentando un recibo de pago de la tasa de basura.
El reciclaje no solo beneficia al medio ambiente, sino también a las personas y a nuestro entorno. Es una práctica que promueve la sostenibilidad y nos permite dejar un legado positivo para las generaciones futuras.
¡Juntos, podemos seguir construyendo una Dénia más limpia, verde y próspera!